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01-08-2018

Los peludos conocen el mundo a nuestro lado. Cada día nuestros consentidos descubren algo nuevo en su entorno, y esto puede despertar distintas emociones, entre ellas la ansiedad.

Los peludos sienten y padecen de una forma parecida a la de los seres humanos. Una situación inesperada o estresante puede generar un ataque de ansiedad en nuestro consentido. Es importante saber identificar los síntomas para brindarle todo el apoyo posible.

El miedo es una respuesta del sistema nervioso autónomo, que responde al instinto de supervivencia. Esto puede desencadenar lucha, huida o parálisis, que son las respuestas más comunes que nuestro peludo puede manifestar cuando se encuentre ante una amenaza.

Cuando el miedo es persistente o se desencadena ante un estímulo concreto, podemos hablar de fobias. En el caso de los consentidos pueden generarle ansiedad ciertos objetos o lugares que activen su memoria emocional.

Síntomas de ansiedad: temblores, cola entre las patas, pérdida de energía y comportamientos de huida son algunas de las señales de que nuestro peludito necesita de nosotros para afrontar una situación que le genera ansiedad.

Abrazar a tu peludo. Una de las fobias más comunes entre los peludos es la de quedarse solos. Por eso es importante que en todo momento le expreses tu amor. Un abrazo siempre será un bálsamo para calmar la ansiedad y estrechar lazos de confianza.

Está atento a la evolución de su comportamiento. Puede que tu peludo se vuelva un poco más ansioso con el paso del tiempo, debido a un cambio en el sistema nervioso provocado por la edad.

Acompáñalos. El aislamiento puede influir en el temperamento de nuestros peludos, lo que lo vuelve propenso a ser ansioso.

Borrón y cuenta nueva. Si tu peludito atravesó alguna experiencia fuerte, ayúdalo a superarla con entrenamiento y pequeños incentivos.

Busca un aliado. La ansiedad crónica de los peludos se diagnostica en la consulta del veterinario, quien evaluará si es necesario que tome medicación para superar los episodios.

No les des dulces. El alto índice de glucosa de los snacks hace que esa azúcar entre en el torrente sanguíneo de nuestros peludos y se acelere su ritmo cardiaco. No es buena idea.

Con estos sencillos consejos tu peludito encontrará un equilibrio emocional que lo ayudará a ser más feliz a tu lado.